Como cuidar tus rodillas al correr
Las rodillas se encargan de distribuir el impacto por todo el cuerpo, por lo que se requiere un cuidado mayor.
Seas un profesional o un aficionado, la parte del cuerpo que más sufre al correr son las rodillas, ya que se encargan de distribuir el impacto por todo el cuerpo.
Por eso suelen lesionarse muy seguido, aunque la buena noticia es que hay algunas precauciones que se pueden tomar para protegerlas.
Fortalecer los cuádriceps. Este es el punto más importante, porque unos músculos fuertes harán que se amortigüe el impacto que recibe el cartílago. Para trabajar los cuádriceps las clásicas sentadillas son el ejercicio más efectivo; pero la bicicleta es una buena actividad complementaria, porque genera mucho movimiento en la rodilla. Y eso hace que el líquido de la articulación lubrique mucho mejor la zona, lo que disminuye las molestias.
Entrenar de forma suave y progresiva. Este consejo es principalmente para los corredores principiantes, quienes deberán comenzar a correr de a poco. A medida que la musculatura se vaya fortaleciendo se podrá aumentar la intensidad lentamente.
Realizar entrenamientos semanales. Es importante acostumbrar al cuerpo, por eso lo ideal es hacer tres o cuatro sesiones a la semana, siempre cortas y suaves. Así los músculos y las articulaciones se acostumbrarán a la nueva exigencia.
Aumentar la cadencia. Este punto es clave, y se trata de hacer más pasos por minuto. Es decir, reducir la zancada. Eso minimizará el impacto y mejorará el rendimiento en cada carrera.
Flexionar las rodillas. Es esencial mantenerlas flexionadas, porque eso produce que el impacto de cada pisada sea menor, dañando menos la estructura ósea y articular.
Fortalecer las abdominales. Por último, no se debe olvidar que al correr el centro de gravedad está en el “core”, es decir, en la zona abdominal.
Por eso, es muy recomendable complementar los entrenamientos de running con ejercicios abdominales para tonificar esta zona. Esto llevará a mejorar la postura y a correr mejor.