Rompe el récord mundial de 42k llevando a sus cinco hijos
Guinness World Records reconoció a Chad Kempel por terminar un maratón llevando a sus cinco hijos.
Tras muchos años de combate contra la infertilidad y la pérdida de algunos embarazos, la esperanza de Chad y Amy Kempel empezaba a diluirse y aquellos sueños de familia muy numerosa comenzaba a complicarse.
Pero el destino les tendría listo una gran sorpresa, con la llegada de nada más y nada menos que quintillizos. Sí, cinco bebés a la vez.
Así nacieron Lincoln, Grayson, Preston, Noelle y Gabriella, dando lugar a un hermoso caos en la casa, tal como describieron los flamantes padres en una entrevista con los Guinness World Records.
¿Por qué la nota? Con mucho entusiasmo el padre decidió continuar sus entrenamientos pero sumándole a sus cinco hijos.
“Una de mis escapadas, después de que se acuestan o por la mañana temprano, es salir a correr. Es lo mío, es mi antidepresivo, es mi sensación de bienestar, es mi celebración. Cada emoción, la combino con la carrera…Cuando tuvimos a los quintillizos, no esperaba que saliera a correr con los cinco al mismo tiempo. Pero lo hice”, contó Chad.
¿De qué manera? Sí, el flamante padre se puso a pensar cómo podría incorporar a sus cinco bebés a su rutina. Y lo logró al conseguir un cochecito en el que pudieran ir todos sentados, listos para la aventura.
“Tuve la idea de completar una maratón completa empujando a los quintillizos. Y pensé, oye, cuando lo haga, como extra, voy a intentar establecer un nuevo Récord Mundial Guinness para este evento”, desarrolló Chad sobre su aventura.
El lugar elegido fue California, en la Maratón de Modesto. Allí, con el cochecito bien cargado, recorrió los 42 kilómetros en 4 horas, 42 minutos y 49 segundos y estableció el flamante récord del tiempo más rápido de un hombre empujando un carro con quintillizos.
Incluso el tiempo podría haber sido algo menor, pero “estábamos corriendo hacia la meta y pensé que no quería que este momento terminara. Así que me detuve, me puse a caminar y me dije que iba a cruzar esto y a asimilarlo todo… Quiero que los niños sepan que todo es posible”, cerró feliz.