Consejos a tener en cuenta si estás pensando empezar a correr
Te daremos una serie de consejos que debes tener en cuenta importantes para iniciarte en la actividad.
Correr es una actividad con muchísimos beneficios, muy disfrutable, y que cualquier persona que esté sana, sin algún impedimento físico importante, puedo realizar sin problemas.
Pero siempre hay que tener en cuenta que convertirse en runner no es algo que ocurrirá de la noche a la mañana. Por eso te daremos una serie de consejos que debes tener en cuenta.
Realizarte un chequeo médico completo.
Lo primero será saber si estás realmente en condiciones de empezar a entrenar.
Deberás descartar que tengas problemas de columna; cardiorrespiratorios severos; de articulaciones, especialmente rodillas y caderas; o lesiones estructurales importantes en los pies.
El precalentamiento es obligatorio.
Siempre hay que tener en cuenta que es imprescindible realizar un buen calentamiento previo. Tomarse diez minutos para preparar músculos, articulaciones, tendones, e incluso los pulmones y el corazón, hará que evites lesiones.
Hidratase bien.
Beber agua antes y después del entrenamiento es fundamental para que tu cuerpo esté bien hidratado y, también, mantener el balance hídrico. Hay que tener presente que el agua devuelve al organismo los minerales necesarios para lograr una óptima recuperación.
Entrenar para correr.
Algo que no se debe perder de vista es que no se sale a “correr directamente”, y mucho menos por demasiado tiempo, sino que primero hay que prepararse para estar en condiciones de correr realmente.
Eso significa ir de menos a más. Por ejemplo, el primer día se podría entrenar durante 30 minutos nada más, en los que se realizará el calentamiento, el running y la recuperación.
Y un buen consejo es que se puede comenzar alternando un minuto en el cual se corra rápido, con un minuto caminando deprisa.
Luego, en cada sesión se puede ir subiendo el tiempo, pero no más que de a cinco minutos por día.
Ser constante.
Está bien tomarse un día totalmente de descanso, como por ejemplo el domingo.
Pero es importante que el resto de los días se entrene, para así ir avanzando lenta pero firmemente.
Correr con música o cambiar de lugar.
Para que correr no resulte aburrido, se puede recurrir a pequeños trucos como hacerlo escuchando la música que te gusta o cambiar el recorrido. Pero, en ese caso, conviene definirlo antes, para luego poder concentrarse sólo en el ejercicio.